Doñana se enfrenta a una agonía por la falta de agua y la sobreexplotación del acuífero

Doñana agoniza por falta de agua

El drama ambiental en esta zona protegida se agrava día tras día. La laguna de Santa Olalla, la más extensa y significativa del enclave natural de Doñana, se secará por segundo verano consecutivo en veinte días, a mediados de agosto, lo cual representa un empeoramiento respecto al año anterior, según ha alertado la Estación Biológica de Doñana (EBD-CSIC).

La Infraestructura Científico-Técnica Singular (ICTS-Reserva Biológica de Doñana) ha tomado medidas para monitorizar el secado de Santa Olalla. El pasado viernes, instalaron una nueva cámara en el parque nacional con el fin de seguir de cerca la evolución de la laguna. Este hecho es alarmante, ya que nunca antes se había registrado el secado de Santa Olalla durante dos años consecutivos, lo que demuestra la grave situación en la que se encuentra el sistema lagunar del Parque Nacional.

“Santa Olalla es la laguna más grande de Doñana y se alimenta principalmente del agua subterránea del acuífero. Es considerada una laguna permanente, es decir, al contrario que otras lagunas más pequeñas, mantiene agua durante todo el año. O al menos, lo mantenía”, ha resaltado la EBD-CSIC a través de un comunicado.

Una agonía que se repite

El pasado año, a finales de agosto, se pudo constatar la agonía de Santa Olalla ante una intensa desecación que nunca antes había sufrido de manera tan significativa. Aunque la laguna ya se había secado por completo en dos ocasiones anteriores, nunca antes se había enfrentado a periodos tan prolongados de sequía extrema. La dramática imagen de la gran cubeta completamente seca dio la vuelta al mundo.

Tristemente, este año la situación se repite, y lo peor es que sucederá mucho antes que el año anterior, lo cual evidencia “la situación crítica en la que se encuentra el sistema de lagunas de Doñana, que da refugio a una gran biodiversidad y que constituye uno de los ecosistemas más valiosos del espacio protegido”, resalta la EBD-CSIC.

La sobreexplotación del acuífero es uno de los principales factores que contribuyen a la degradación de las lagunas de Doñana.

De hecho, un estudio publicado por la EBD-CSIC revela que casi el 60% de las lagunas que existían en los años ochenta del siglo pasado ya han desaparecido. Además, el 80% de las lagunas se secan antes de lo esperado por la precipitación y un 84% se inunda menos de lo esperado por las condiciones climáticas, lo que demuestra que la actividad humana está alterando el equilibrio natural del ecosistema.

Otro estudio de la Estación Biológica de Doñana-CSIC señala que la progresiva colonización terrestre de las cubetas de las lagunas debido a la escasa inundación es un claro indicador de su deterioro. Muchas lagunas de Doñana ya están cubiertas de pinos y matorrales, lo que indica que su recuperación es prácticamente imposible. Las imágenes satélite también confirman que la vegetación terrestre ha comenzado a colonizar Santa Olalla.

Los enemigos de Doñana

La agricultura y el turismo son considerados los principales enemigos del equilibrio ecológico en Doñana. La expansión dramática de estas actividades en áreas cercanas ha provocado una severa disminución del nivel freático, reduciendo la duración del hidroperíodo de las lagunas e incluso llevándolas a la desecación.

Ante esta alarmante situación, la ICTS-Reserva Biológica de Doñana ha decidido instalar una webcam en la zona de la cubeta que fue la última en secarse el año pasado para monitorizar periódicamente su estado. La ciudadanía puede seguir la retransmisión en directo a través de su página web.

La gravedad de la situación ha llevado a los científicos a destacar la “necesidad de una restauración y gestión activas” para salvar el sistema lagunar de Doñana y preservar la valiosa biodiversidad que alberga. El estudio sobre la sobreexplotación de los acuíferos de Doñana revela datos preocupantes y enfatiza la importancia de tomar medidas para disminuir la presión humana sobre el parque y proteger este Patrimonio de la Humanidad en estado crítico. @mundiario

1. Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) abordados en el artículo:

• Objetivo 6: Agua limpia y saneamiento
• Objetivo 13: Acción por el clima
• Objetivo 15: Vida de ecosistemas terrestres

El artículo aborda la falta de agua en la zona protegida de Doñana, lo que está directamente relacionado con el Objetivo 6 de Agua limpia y saneamiento. También menciona la sequía extrema y la sobreexplotación del acuífero, lo que está relacionado con el Objetivo 13 de Acción por el clima. Además, se menciona el deterioro de las lagunas y la colonización terrestre, lo que está relacionado con el Objetivo 15 de Vida de ecosistemas terrestres.

2. Metas específicas de los ODS identificadas en el artículo:

• Meta 6.4: Para 2030, reducir significativamente la cantidad de agua dulce desperdiciada y aumentar la reciclada
• Meta 13.1: Reforzar la resiliencia y la capacidad de adaptación a los riesgos relacionados con el clima y los desastres naturales en todos los países
• Meta 15.1: Para 2020, asegurar la conservación, restablecimiento y uso sostenible de los ecosistemas terrestres y de agua dulce, en particular los bosques, los humedales, las montañas y los ecosistemas áridos y semiáridos

El artículo no menciona metas específicas de los ODS, pero se pueden identificar metas relacionadas con el contenido del artículo. La reducción del desperdicio de agua dulce y el aumento del reciclaje se relacionan con la meta 6.4. El fortalecimiento de la resiliencia y la capacidad de adaptación a los riesgos climáticos se relaciona con la meta 13.1. La conservación y el uso sostenible de los ecosistemas terrestres y de agua dulce se relacionan con la meta 15.1.

3. Indicadores de los ODS mencionados o implícitos en el artículo:

• Indicador 6.4.2: Nivel de estrés hídrico: proporción de la extracción total de agua con respecto a la disponibilidad total de agua renovable
• Indicador 13.1.1: Número total de muertes, desapariciones, personas heridas o afectadas, infraestructuras dañadas y servicios interrumpidos como resultado de desastres naturales per cápita y según categoría de desastre
• Indicador 15.1.1: Superficie forestal como proporción de la superficie terrestre total

El artículo no menciona indicadores específicos de los ODS, pero se pueden identificar algunos indicadores relevantes para medir el progreso hacia los objetivos identificados. El nivel de estrés hídrico, que mide la proporción de extracción de agua con respecto a la disponibilidad total de agua renovable, es un indicador relevante para el Objetivo 6. El número de muertes, desapariciones, personas heridas o afectadas, infraestructuras dañadas y servicios interrumpidos como resultado de desastres naturales per cápita y según categoría de desastre es un indicador relevante para el Objetivo 13. La superficie forestal como proporción de la superficie terrestre total es un indicador relevante para el Objetivo 15.

4. Tabla de ODS, metas e indicadores:

¡Atención! Este espléndido artículo nace de la fuente del conocimiento, moldeado por una maravillosa tecnología patentada de inteligencia artificial que profundizó en un vasto océano de datos, iluminando el camino hacia los Objetivos de Desarrollo Sostenible. Recuerda que todos los derechos están reservados por SDG Investors LLC, lo que nos permite defender el progreso juntos.

Fuente: mundiario.com

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