Proponen ley sobre salud del suelo para evitar crisis de seguridad alimentaria – THE FOOD TECH – Medio de noticias líder en la Industria de Alimentos y Bebidas

Legislación propuesta para la salud del suelo en la Unión Europea

Las autoridades de la Unión Europea están proponiendo legislación para abordar el problema de la salud del suelo, con el objetivo de revitalizar la tierra y preservar sus capacidades agrícolas y de captura de carbono. Según los últimos datos, hasta el 73% del suelo agrícola en la región no es saludable.

La degradación del suelo tiene un costo estimado de más de 50.54 millones de euros al año, por lo que esta nueva propuesta busca otorgar al suelo el mismo nivel de protección jurídica que se le da al aire y al agua en la UE.

La mala calidad del suelo crea una serie de riesgos para la salud humana, el medio ambiente, el clima, la economía y la sociedad. Estos riesgos incluyen la seguridad alimentaria, la calidad del agua, el aumento de los impactos de las inundaciones y las sequías, la producción de biomasa, las emisiones de carbono y la pérdida de biodiversidad, según se menciona en la propuesta.

Los suelos degradados reducen la provisión de servicios ecosistémicos como alimentos, piensos, fibra, madera y ciclo de nutrientes. También afectan el control de plagas y la regulación del agua, según la Comisión Europea (CE).

Estos riesgos se han intensificado debido a la guerra en Ucrania, ya que los suelos tienen una “importancia geoestratégica” para garantizar el suministro de alimentos a largo plazo y alimentar a la creciente población mundial.

¿Qué propone la ley propuesta?

La legislación propuesta no establece objetivos vinculantes, pero ofrece incentivos voluntarios para que los agricultores mejoren sus prácticas. Algunos de estos incentivos incluyen la certificación de la salud del suelo, la agricultura de carbono y los pagos por servicios ecosistémicos.

A pesar de la posibilidad de una ley de salud del suelo en la UE, no todos están convencidos de su alcance y consideran que la propuesta es muy débil. La meta de lograr suelos saludables para 2050 solo se menciona como una perspectiva y posible consecuencia de las medidas.

Según el portavoz de política agrícola de los Verdes en el Parlamento Europeo, la propuesta carece de objetivos y obligaciones para elaborar planes, lo cual es incomprensible considerando la estrategia de biodiversidad de la UE. Además, no se incluyen objetivos o instrumentos para restaurar la biodiversidad en el suelo.

Aunque la ley propuesta para la salud del suelo proporciona una base sólida en términos de descriptores del suelo, indicadores y prácticas de gestión sostenible, no cuenta con directrices claras ni herramientas innovadoras para el uso y la restauración del suelo por parte de los actores de la cadena agroalimentaria.

Mejorar la salud del suelo

La nueva ley establecerá las reglas para medir, gestionar y restaurar la salud del suelo en toda la Unión Europea. Requerirá que los estados miembros limpien los sitios contaminados que representan una amenaza para las personas y la naturaleza.

La ley también definirá qué se entiende por suelo sano y cómo debe ser monitoreado. Además, obligará a los estados miembros a identificar buenas y malas prácticas para el uso del suelo, especialmente en la agricultura.

Los agricultores y propietarios de tierras se beneficiarán de los datos y tecnologías del suelo, así como de la diversificación de cultivos, la agricultura de precisión y el desarrollo de plantas. Estas herramientas pueden ayudar a mejorar la fertilidad y productividad del suelo, al tiempo que ahorran agua y nutrientes.

Por último, la legislación propuesta también fomentará nuevos modelos de negocio, como la agricultura de carbono, donde se pagará a los agricultores por capturar carbono en sus suelos.

1. Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) abordados en el artículo:

• ODS 2: Hambre cero
• ODS 3: Salud y bienestar
• ODS 6: Agua limpia y saneamiento
• ODS 13: Acción por el clima
• ODS 15: Vida de ecosistemas terrestres

2. Metas específicas de los ODS identificadas en el artículo:

• Meta 2.4: Para 2030, asegurar la sostenibilidad de los sistemas de producción de alimentos y aplicar prácticas agrícolas resilientes que aumenten la productividad y la producción, que ayuden a mantener los ecosistemas, que fortalezcan la capacidad de adaptación al cambio climático, los fenómenos meteorológicos extremos, las sequías, las inundaciones y otros desastres, y que mejoren progresivamente la calidad del suelo.
• Meta 3.9: Para 2030, reducir el número de muertes y enfermedades causadas por productos químicos peligrosos y la contaminación y degradación del aire, el agua y el suelo de manera significativa.
• Meta 6.6: Para 2020, proteger y restablecer los ecosistemas relacionados con el agua, incluidos los bosques, las montañas, los humedales, los ríos, los acuíferos y los lagos.
• Meta 13.3: Mejorar la educación, la sensibilización y la capacidad humana e institucional respecto de la mitigación del cambio climático, la adaptación a él, la reducción de sus efectos y la alerta temprana.
• Meta 15.3: Para 2030, combatir la desertificación, restaurar la tierra y el suelo degradado, incluidas las tierras afectadas por la desertificación, la sequía y las inundaciones, y luchar por lograr un mundo neutro en cuanto a la degradación del suelo.

3. Indicadores de los ODS mencionados o implícitos en el artículo:

• Indicador 2.4.1: Proporción de tierras agrícolas sujetas a degradación de suelos.
• Indicador 3.9.1: Mortalidad atribuible a la contaminación del aire, el agua y el suelo.
• Indicador 6.6.1: Cambio en la extensión de los ecosistemas relacionados con el agua.
• Indicador 13.3.1: Número de países que han comunicado el fortalecimiento de la educación, la sensibilización y la capacidad humana e institucional respecto de la mitigación del cambio climático, la adaptación a él, la reducción de sus efectos y la alerta temprana.
• Indicador 15.3.1: Superficie de tierra degradada y proporción respecto a la superficie total.

4. Tabla de ODS, metas e indicadores: