Turismo sexual infantil, el nuevo mercado emergente que viola los derechos de los niños – Entorno Turístico

Informe sobre el turismo sexual infantil

Introducción

El incremento acelerado de las redes de trata infantil ha creado un foco de atención importante dentro de la comunidad internacional. Por ello, se ha desarrollado una definición que empata con este nuevo fenómeno. El turismo sexual infantil es definido como la actividad turística realizada a partir de la explotación sexual de un menor a cambio de un pago, ya sea monetario o en especie.

Situación actual en Latinoamérica

Este fenómeno se ha alejado de Asia y ha encontrado un nuevo mercado en Latinoamérica. México se ha posicionado entre los primeros países de consumo de pornografía infantil y la práctica de explotación sexual infantil. Ambas son causas directas que facilitan el desarrollo de redes de turismo sexual infantil y, con ello, el establecimiento de zonas específicas al interior del país. Como lo que ocurre en Guerrero y Quintana Roo.

Causas y factores de vulnerabilidad

Contrario al mercado de tráfico de armas o drogas, las redes de turismo sexual permiten la venta y explotación de las víctimas en múltiples ocasiones. Un menor puede ser sexualmente atacado más de 10 veces al día. La globalización también ha provocado su crecimiento, pues ha facilitado la accesibilidad y la expansión de este tipo de turismo alrededor del mundo. Asimismo, ha permitido el uso de nuevas tecnologías que favorecen la comunicación e interconectividad entre quienes forman parte de ellas.

Sin embargo, para entender su origen y desarrollo, resulta vital tomar en cuenta las condiciones sociales, económicas y políticas. Por culpa de la inestabilidad de estos elementos, es que regiones y países se vuelven más vulnerables a convertirse en puntos destino.

La pobreza es un condicionante para estos escenarios. En México, existen estados cuya principal fuente de ingresos es el turismo. Es por ello que se origina una presión económica que beneficia al desarrollo del turismo sexual infantil. La falta de oportunidades, en muchos casos, obliga a los padres a vender, explotar sexualmente o promover la entrada de los niños a las redes de trata como fuente para cubrir sus carencias. Consecuentemente, se acrecienta la disponibilidad de futuras víctimas y es una causa directa para el rápido desarrollo de explotadores y traficantes.

Añadiendo, la pobreza se encuentra vinculada a la desigualdad. A pesar de que el turismo sexual afecta a ambos géneros, las cifras de víctimas femeninas son mayores que las masculinas. La brecha de género vulnera a las niñas, poniéndolas en situaciones de fácil manipulación y/o persuasión que produce una falsa esperanza en la mejora de su calidad de vida. De acuerdo con la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), el 80% de las víctimas son niñas. Es a través de mentiras y promesas inciertas que logran atraer a este sector poblacional. Con información del Centro de Investigación Política, se ha encontrado que las mujeres reciben un ingreso hasta 35 % menor que los hombres.

Más allá de que no existe una limitación fronteriza para este tipo de abuso, el ambiente interno de una nación estimula e influencia el impacto y vulnerabilidad. La migración, por ejemplo, se ha convertido en una causa que favorece el turismo sexual infantil. La localización geográfica de México, colindando con Norteamérica, América Central y Sudamérica, lo ha transformado en un territorio de tránsito y destino para los extranjeros.

Impacto en los derechos de los niños

Lamentablemente, el incremento de los países destino, países fuente y países tránsito en el sistema del turismo sexual infantil es el reflejo de la inefectividad por parte del Estado y la inoperancia internacional para atender y mitigar este problema. Ellos han fallado en la reducción y desmantelamiento de las redes y protección de los niños. El turismo sexual infantil es una de las amenazas principales al respeto y reconocimiento de los derechos de los niños y pone en riesgo su desarrollo e infancia. Las víctimas son física y psicológicamente torturadas, humilladas y se encuentran en situaciones donde las circunstancias los obligan a intercambiar sexo por supervivencia.

Los niños y las niñas son expuestos a condiciones y situaciones que atentan con su desarrollo físico. Por ende, hay una profunda y visible alteración en el funcionamiento correcto del cuerpo de la víctima. Es común observar abortos peligrosos, dolor pélvico crónico, infecciones, entre otras. Correlacionado, se encuentra el daño psicológico, pues los niños viven un ambiente tóxico donde las ofensas y los castigos son herramientas de manipulación, es decir, viven en un ecosistema que normaliza actitudes y comportamientos abusivos, por lo que es común que las víctimas sufran de ansiedad, trastorno de estrés postraumático, adicciones, etc. Los explotadores se aprovecharán de la inocencia de los niños para controlarlos. En razón de lo cual se encuentran afectadas las habilidades sociales, el valor en sí mismo y la confianza en otras personas.

Conclusiones

En los últimos años

1. Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) abordados en el artículo:

• Objetivo 5: Igualdad de género
• Objetivo 8: Trabajo decente y crecimiento económico
• Objetivo 10: Reducción de las desigualdades
• Objetivo 16: Paz, justicia e instituciones sólidas
• Objetivo 17: Alianzas para lograr los objetivos

2. Metas específicas de los ODS identificadas en el artículo:

• Meta 5.2: Eliminar todas las formas de violencia contra todas las mujeres y niñas en los ámbitos público y privado, incluidas la trata y la explotación sexual y otros tipos de explotación.
• Meta 8.7: Tomar medidas inmediatas y eficaces para erradicar el trabajo forzoso, poner fin a las formas modernas de esclavitud y la trata de seres humanos, y asegurar la prohibición y eliminación de las peores formas de trabajo infantil, incluidos el reclutamiento y la utilización de niños soldados, y, a más tardar en 2025, poner fin al trabajo infantil en todas sus formas.
• Meta 10.2: Empoderar y promover la inclusión social, económica y política de todas las personas, independientemente de su edad, sexo, discapacidad, raza, etnia, origen, religión o situación económica u otra condición.
• Meta 16.2: Poner fin al maltrato, la explotación, la trata y todas las formas de violencia y tortura contra los niños.
• Meta 17.16: Mejorar la aplicación de la legislación y fortalecer las instituciones encargadas de promover el acceso a la justicia y de proporcionar servicios legales.

3. Indicadores de los ODS mencionados en el artículo:

• Indicador 5.2.1: Proporción de mujeres y niñas víctimas de violencia física o sexual en los últimos 12 meses.
• Indicador 8.7.1: Tasa de prevalencia del trabajo infantil, por grupos de edad, sexo y forma de trabajo.
• Indicador 10.2.1: Proporción de personas que viven por debajo de la línea internacional de pobreza multidimensional, por sexo, edad y personas con discapacidad.
• Indicador 16.2.2: Proporción de jóvenes y adultos que han experimentado violencia física, sexual o psicológica en los últimos 12 meses.
• Indicador 17.16.1: Número de países que han promulgado y aplicado leyes para garantizar la igualdad de derechos de las mujeres y las niñas.

4. Tabla de ODS, metas e indicadores:

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Fuente: entornoturistico.com

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