Arsénico en el agua: cuáles son las diferencias clave entre el suministro de red y pozo – Infobae
Informe sobre la Contaminación por Arsénico en el Agua en Argentina y su Vínculo con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS)
Un reciente informe elaborado por el Instituto Tecnológico de Buenos Aires (ITBA), dirigido por Jorge Stripeikis, Director de Ingeniería Química, ha puesto de manifiesto la problemática de la contaminación por arsénico en las fuentes de agua subterránea de Argentina. Este análisis subraya la urgencia de abordar esta situación en el marco de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), particularmente aquellos relacionados con la salud, el agua limpia y las alianzas estratégicas.
Contexto del Problema: Origen y Distribución del Arsénico
Origen Geológico Natural
La investigación confirma que la presencia de arsénico en los acuíferos argentinos es un fenómeno de origen natural, derivado de procesos geológicos vinculados a la formación de la Cordillera de los Andes. Las cenizas volcánicas y las sedimentaciones a lo largo de milenios han infiltrado este elemento en el subsuelo, descartando que se trate de un problema de contaminación industrial reciente.
Zonas Afectadas y Niveles de Riesgo
El estudio identifica niveles de arsénico que superan las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS) en diversas regiones del país.
- Provincias Involucradas: Se han detectado concentraciones preocupantes en al menos siete provincias, incluyendo vastas áreas de Buenos Aires, el sur de Córdoba y Santa Fe.
- Fuentes de Agua: El principal riesgo se concentra en el agua subterránea (napas), a la que se accede mediante pozos domiciliarios. El agua superficial, proveniente de ríos y lagos que abastecen a las redes centralizadas, generalmente está libre de este contaminante.
Hallazgos Clave y su Impacto en la Salud Pública
Niveles de Concentración y Estándares Internacionales
La OMS establece un límite seguro de 10 partes por billón (PPB) para el arsénico en agua de consumo. El informe del ITBA clasifica el riesgo según la concentración:
- Menos de 10 PPB: Nivel considerado seguro para el consumo humano.
- Entre 10 y 50 PPB: Nivel que requiere vigilancia y control constante, aunque no se ha encontrado evidencia significativa de efectos adversos.
- Más de 50 PPB: Nivel que prohíbe el consumo directo del agua bajo cualquier circunstancia.
Composición Química y Toxicidad
Un hallazgo relevante es que el 90% del arsénico presente en los acuíferos es de la variedad “arsénico cinco”, que es diez veces menos tóxica que el “arsénico tres”. Esta predominancia mitiga parcialmente el riesgo general, pero no elimina la necesidad de monitoreo y acción.
Alineación con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS)
La problemática del arsénico en el agua impacta directamente en la consecución de varios ODS fundamentales para el desarrollo de Argentina.
ODS 3: Salud y Bienestar
La exposición prolongada al arsénico a través del agua de consumo es la causa directa del Hidroarsenicismo Crónico Regional Endémico (HACRE). Esta enfermedad representa una amenaza directa para el ODS 3, ya que puede derivar en afecciones graves como cáncer de piel, pulmón y vejiga, además de otros problemas cutáneos y respiratorios. Garantizar agua segura es una medida de salud pública preventiva indispensable.
ODS 6: Agua Limpia y Saneamiento
Este informe pone en el centro de la discusión el ODS 6, que busca garantizar la disponibilidad y gestión sostenible del agua y el saneamiento para todos. La brecha entre la seguridad del agua de red y los riesgos del agua de pozo evidencia una inequidad en el acceso a agua potable segura. La expansión de la infraestructura de agua potable y la implementación de tecnologías de tratamiento son cruciales para avanzar hacia la meta de este objetivo.
ODS 11: Ciudades y Comunidades Sostenibles
La vulnerabilidad se concentra en localidades rurales, parajes y barrios sin servicios públicos centralizados, donde el acceso al agua depende de perforaciones individuales. Abordar esta situación es vital para cumplir con el ODS 11, que promueve asentamientos humanos inclusivos, seguros y resilientes, asegurando el acceso a servicios básicos para todos sus habitantes.
ODS 17: Alianzas para Lograr los Objetivos
La solución a este desafío requiere una colaboración multisectorial, un principio fundamental del ODS 17. La iniciativa del ITBA, que ofrece un mapa interactivo y análisis de muestras, en colaboración con organismos como AYSA y la participación ciudadana, es un modelo ejemplar de cómo la ciencia, el sector público y la sociedad civil pueden trabajar juntos para monitorear, informar y resolver problemas complejos.
Estrategias de Mitigación y Soluciones Propuestas
Monitoreo y Concientización
La principal herramienta de prevención es la información. Se destaca la importancia de iniciativas como el mapa interactivo del arsénico del ITBA, que permite a la población identificar zonas de riesgo y enviar muestras para análisis. El monitoreo periódico, especialmente en pozos privados, es fundamental.
Soluciones Tecnológicas y de Infraestructura
Existen métodos efectivos para la remoción del arsénico, cuya implementación es clave para mitigar el riesgo.
- Tratamientos Centralizados: Algunas comunidades han resuelto el problema incorporando procesos de ósmosis inversa en sus plantas de distribución o transportando agua desde fuentes superficiales seguras.
- Soluciones Domiciliarias: Para los hogares que dependen de pozos, existen filtros específicos y sistemas de ósmosis inversa a pequeña escala.
- Expansión de la Red: Si bien ha habido una expansión significativa del servicio de agua de red, es imperativo continuar con las políticas públicas para alcanzar a las comunidades que aún dependen de perforaciones individuales.
Conclusión
El informe del ITBA evidencia que, si bien la contaminación por arsénico es un desafío natural y persistente en Argentina, existen las herramientas científicas, tecnológicas y colaborativas para gestionarlo eficazmente. Un enfoque proactivo, centrado en el monitoreo constante, la inversión en infraestructura y la educación pública, es esencial para proteger la salud de la población y avanzar de manera decidida hacia el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
1. ¿Qué Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) se abordan o están conectados con los temas destacados en el artículo?
ODS 3: Salud y Bienestar
- El artículo se centra en los graves riesgos para la salud asociados con la ingestión de agua contaminada con arsénico. Menciona explícitamente el “hidroarsenicismo crónico regional endémico (HACRE)” y su potencial para derivar en “enfermedades crónicas severas, como cáncer de piel, pulmón y vejiga, además de diversas afecciones cutáneas y problemas respiratorios”. Esto conecta directamente con el objetivo de garantizar una vida sana y promover el bienestar.
ODS 6: Agua Limpia y Saneamiento
- Este es el ODS central del artículo. Toda la discusión gira en torno a la calidad del agua potable en Argentina, la presencia del contaminante arsénico, y la diferencia en la seguridad del agua entre los sistemas de red centralizados y las fuentes de agua subterránea como los pozos domiciliarios. Aborda la necesidad de monitoreo, tratamiento (“ósmosis inversa”) y el acceso universal a agua segura, destacando que “aún subsisten miles de pequeños pueblos y parajes donde el acceso depende de perforaciones individuales”.
ODS 17: Alianzas para lograr los Objetivos
- El artículo destaca la importancia de la colaboración entre diferentes actores para abordar el problema. Se menciona la investigación del Instituto Tecnológico de Buenos Aires (ITBA), la colaboración con la empresa de agua AYSA para analizar y garantizar la seguridad de las redes, y la participación ciudadana a través del envío de muestras para análisis. El director del ITBA recalca “la importancia de la colaboración entre los ciudadanos, el sistema científico y los organismos estatales”.
2. ¿Qué metas específicas de los ODS se pueden identificar en función del contenido del artículo?
-
Meta 3.9:
“Para 2030, reducir sustancialmente el número de muertes y enfermedades producidas por productos químicos peligrosos y la contaminación del aire, el agua y el suelo”. El artículo se alinea directamente con esta meta al enfocarse en la enfermedad (HACRE) causada por un químico peligroso (arsénico) en el agua potable y la necesidad de monitorear y tratar el agua para prevenir estos efectos adversos en la salud.
-
Meta 6.1:
“Para 2030, lograr el acceso universal y equitativo al agua potable, a un precio asequible para todos”. El texto subraya la disparidad en el acceso a agua segura, señalando que el “verdadero riesgo” se encuentra en hogares que dependen de “pozos domiciliarios” en “localidades apartadas o sectores que no cuentan con servicios públicos centralizados”. La discusión sobre la expansión de la red de agua potable también se relaciona con esta meta.
-
Meta 6.b:
“Apoyar y fortalecer la participación de las comunidades locales en la mejora de la gestión del agua y el saneamiento”. La iniciativa del ITBA de crear un “mapa interactivo del arsénico” que permite a la población “enviar muestras para análisis gratuito” es un claro ejemplo de fomento a la participación comunitaria en el monitoreo y gestión de la calidad del agua.
3. ¿Hay algún indicador de los ODS mencionado o implícito en el artículo que pueda usarse para medir el progreso hacia los objetivos identificados?
-
Indicador 6.1.1 (Implícito):
“Proporción de la población que utiliza servicios de suministro de agua potable gestionados de forma segura”. El artículo no proporciona un porcentaje, pero sí describe la situación que define este indicador. Diferencia claramente entre la población que recibe agua de red gestionada por empresas como AYSA (considerada segura) y la población que utiliza agua de pozo sin control, que no calificaría como “gestionada de forma segura” debido al riesgo de arsénico. El progreso se mediría por la expansión de las redes seguras a las zonas que hoy dependen de pozos.
-
Indicador Específico de Calidad del Agua (Mencionado):
El artículo menciona un indicador técnico y medible clave para la seguridad del agua: la concentración de arsénico. Se citan umbrales específicos: “las concentraciones de arsénico en el agua exceden los 10 partes por billón (PPB) sugeridos por la OMS como límite seguro”. Además, se establecen niveles de riesgo: “entre 10 y 50 PPB ya amerita vigilancia y control constante. Por encima de los 50 PPB, no se debería consumir esa agua”. Este es un indicador directo y cuantificable de la calidad del agua, fundamental para evaluar el progreso hacia la Meta 6.1.
4. ODS, metas e indicadores
| ODS | Metas | Indicadores |
|---|---|---|
| ODS 3: Salud y Bienestar | Meta 3.9: Reducir sustancialmente las enfermedades producidas por la contaminación del agua. | Implícito: Incidencia de enfermedades relacionadas con el hidroarsenicismo (HACRE) en las poblaciones expuestas. |
| ODS 6: Agua Limpia y Saneamiento | Meta 6.1: Lograr el acceso universal y equitativo al agua potable segura.
Meta 6.b: Apoyar la participación de las comunidades locales en la gestión del agua. |
Implícito (Indicador 6.1.1): Proporción de la población que utiliza servicios de agua potable gestionados de forma segura (red centralizada vs. pozos individuales).
Mencionado (Indicador técnico): Concentración de arsénico en el agua, medida en partes por billón (PPB), con el límite de 10 PPB de la OMS como referencia. |
| ODS 17: Alianzas para lograr los Objetivos | Meta 17.16 (implícita): Fomentar alianzas entre múltiples interesados (gobierno, sector privado, sociedad civil, academia) para compartir conocimientos y tecnología. | Implícito: Número y efectividad de las colaboraciones entre instituciones científicas (ITBA), empresas de servicios públicos (AYSA) y la ciudadanía para el monitoreo y la solución del problema del arsénico. |
Fuente: infobae.com
¿Cuál es tu reacción?
Me gusta
0
Disgusto
0
Amor
0
Divertido
0
Enojado
0
Triste
0
Guau
0