Consenso recomienda vacunar contra infecciones respiratorias y herpes zóster en adultos con cardiopatías – espanol.medscape.com

Informe: La Vacunación como Estrategia Clave en la Prevención Cardiovascular y su Alineación con el Objetivo de Desarrollo Sostenible 3

Introducción y Contexto en el Marco de los ODS

Un consenso elaborado por tres sociedades médicas argentinas —la Sociedad Argentina de Cardiología (SAC), la Federación Argentina de Cardiología (FAC) y el Consejo Argentino de Residentes de Cardiología (CONAREC)— establece la recomendación de vacunas contra infecciones respiratorias y herpes zóster como una herramienta indispensable para la prevención cardiovascular en adultos. Esta iniciativa se alinea directamente con el Objetivo de Desarrollo Sostenible 3 (Salud y Bienestar), específicamente con la meta 3.4, que busca reducir en un tercio la mortalidad prematura por enfermedades no transmisibles (ENT) mediante la prevención y el tratamiento. Al posicionar la inmunización como un pilar de la prevención cardiovascular, se promueve un enfoque integral y proactivo para la salud pública.

El documento subraya la necesidad de que los profesionales de la salud se involucren activamente en la promoción de la vacunación, no solo como una medida de control de enfermedades infecciosas, sino como un componente esencial de la prevención cardiovascular global. Este enfoque contribuye a la meta 3.8 del ODS 3, que persigue lograr la cobertura sanitaria universal, garantizando el acceso de todas las personas a servicios de salud esenciales de calidad, incluyendo vacunas seguras y eficaces.

Vínculo Fisiopatológico entre Infecciones y Eventos Cardiovasculares

La evidencia científica demuestra una correlación directa entre las infecciones y el aumento del riesgo de eventos cardiovasculares agudos. Los mecanismos subyacentes que justifican la vacunación como medida preventiva incluyen:

• Activación del sistema inmunitario e inflamación sistémica: Las infecciones desencadenan una respuesta inflamatoria que puede desestabilizar las placas de ateroma.
• Estado de hipercoagulabilidad: Se incrementa el riesgo de formación de trombos.
• Estimulación del sistema simpático: Aumenta la demanda de oxígeno del miocardio.
• Disfunción endotelial: Las citocinas proinflamatorias pueden mediar la ruptura de placa y la depresión miocárdica.

Estudios referenciados en el consenso asocian infecciones como la influenza, la neumonía, el COVID-19 y el virus sincitial respiratorio (VSR) con un mayor riesgo de infarto agudo de miocardio e ictus isquémico. La prevención de estas infecciones mediante la vacunación es, por tanto, una estrategia directa para mitigar estos riesgos y fortalecer la resiliencia de la población ante amenazas sanitarias, en línea con la meta 3.d del ODS 3.

Recomendaciones Específicas del Consenso

El documento, alineado con directrices de la Sociedad Europea de Cardiología (ESC) y el Colegio Americano de Cardiología (ACC), emite recomendaciones de Clase I, indicando un consenso general sobre su beneficio y eficacia. Las vacunas priorizadas para individuos con enfermedades cardiovasculares o en riesgo de desarrollarlas son:

1. Vacuna contra la influenza: Se recomienda su aplicación anual con un nivel de evidencia A.
2. Vacuna neumocócica conjugada (20-valente): Indicada para todos los individuos con enfermedades cardiovasculares (nivel de evidencia B).
3. Vacuna contra el virus sincitial respiratorio (VSR): Recomendada para este grupo de pacientes (nivel de evidencia C).
4. Vacuna contra COVID-19: Se recomienda su administración a individuos con patologías cardiovasculares (nivel de evidencia B).
5. Vacuna recombinante contra herpes zóster: Se recomienda debido a que la reactivación del virus se asocia con un riesgo elevado de ictus e infarto en el período posterior a la infección (nivel de evidencia B).

Estrategias para la Implementación y Adherencia

Para garantizar la efectividad de estas recomendaciones y avanzar hacia las metas del ODS 3, el consenso propone estrategias para superar las barreras en la práctica clínica y mejorar las tasas de inmunización. Se destaca la importancia del rol del profesional de la salud como un agente facilitador.

• Comunicación activa y empática: Es crucial explicar a los pacientes los beneficios cardiovasculares de la vacunación, más allá de la protección infecciosa, para aumentar la predisposición y la adherencia.
• Integración en la consulta de rutina: Se debe interrogar sistemáticamente sobre el estado de inmunización en cada consulta, independientemente del motivo de la misma.
• Aprovechamiento de la hospitalización: La internación representa una oportunidad clave para indicar, reforzar y completar los esquemas de vacunación.
• Abordaje de dudas comunes: El documento incluye un anexo con respuestas claras y sencillas a preguntas frecuentes de los pacientes, como la seguridad de la vacunación en personas bajo tratamiento antiagregante o la necesidad de vacunarse a pesar de sentirse bien.

La falta de convicción entre los propios profesionales de la salud es identificada como una barrera significativa. Por ello, se insiste en que la promoción de la vacunación debe comenzar con la inmunización del personal sanitario. La implementación exitosa de estas medidas representa un paso fundamental hacia una prevención cardiovascular integral y el cumplimiento del derecho a la salud y el bienestar para todos.

Análisis de los Objetivos de Desarrollo Sostenible en el Artículo

¿Qué Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) se abordan o están conectados con los temas destacados en el artículo?

• ODS 3: Salud y Bienestar

  Este es el objetivo principal abordado en el artículo. El texto se centra en la prevención de enfermedades y la promoción de la salud. Específicamente, discute cómo la vacunación contra enfermedades infecciosas (influenza, neumonía, herpes zóster, COVID-19) puede servir como una herramienta “indispensable” de prevención cardiovascular. Al reducir la incidencia de infecciones que pueden desencadenar eventos cardiovasculares agudos como infartos o ictus, se busca reducir la mortalidad por enfermedades no transmisibles y mejorar la salud general de los adultos con cardiopatías o en riesgo de desarrollarlas. El artículo enfatiza la vacunación como el “cuarto pilar de la prevención cardiovascular”, lo que subraya su importancia para garantizar una vida sana.

• ODS 17: Alianzas para lograr los objetivos

  El artículo destaca la colaboración entre múltiples organizaciones para alcanzar un objetivo común de salud. Menciona un “consenso de tres sociedades médicas argentinas de cardiología”: la Sociedad Argentina de Cardiología (SAC), la Federación Argentina de Cardiología (FAC) y el Consejo Argentino de Residentes de Cardiología (CONAREC). Esta alianza entre entidades de la sociedad civil es un ejemplo claro de la creación de asociaciones para compartir conocimientos y promover prácticas de salud efectivas. Además, se alinea con posicionamientos de sociedades internacionales como la European Society of Cardiology (ESC) y el American College of Cardiology (ACC), mostrando una colaboración a nivel global para establecer directrices de salud.

¿Qué metas específicas de los ODS se pueden identificar en función del contenido del artículo?

• Meta 3.4: Reducir la mortalidad prematura por enfermedades no transmisibles

  El artículo se enfoca directamente en esta meta. Propone la vacunación como una estrategia para prevenir eventos cardiovasculares (infartos, ictus, insuficiencia cardíaca), que son las principales causas de mortalidad por enfermedades no transmisibles (ENT). Al señalar que infecciones como la influenza o el herpes zóster aumentan el riesgo de estos eventos, el consenso médico busca reducir dicha mortalidad mediante la prevención de las infecciones desencadenantes. El Dr. García Zamora explica que “la gente está más predispuesta a vacunarse si sabe que [las vacunas] también pueden servir para prevenir un infarto o un ictus”.

• Meta 3.b: Apoyar la investigación y el desarrollo de vacunas y medicamentos

  Aunque el artículo no trata sobre el desarrollo de nuevas vacunas, sí apoya firmemente el uso de las vacunas existentes basándose en una amplia evidencia científica. El consenso “incluye más de 200 referencias bibliográficas con estudios que apuntalan esa relación [entre infecciones y eventos cardiovasculares] y la efectividad y seguridad preventiva de las respectivas vacunas”. Al promover la vacunación y la concienciación sobre su eficacia, se apoya indirectamente la importancia de la investigación y el desarrollo en este campo para la salud pública.

• Meta 3.d: Reforzar la capacidad de alerta temprana, reducción de riesgos y gestión de los riesgos para la salud

  El artículo representa un esfuerzo por parte de la comunidad médica para reforzar la capacidad de gestión de riesgos para la salud. Al educar a los cardiólogos y otros profesionales sobre el vínculo entre las infecciones y las enfermedades cardíacas, y al instarlos a “involucrarse activamente” en la promoción de la vacunación, se está mejorando el sistema de prevención. El documento de consenso actúa como una herramienta para la reducción de riesgos en una población vulnerable (pacientes con cardiopatías), fortaleciendo la primera línea de defensa contra complicaciones graves.

• Meta 17.17: Fomentar y promover la constitución de alianzas eficaces

  La creación del “documento conjunto” por parte de la SAC, la FAC y el CONAREC es una manifestación directa de esta meta. Estas organizaciones de la sociedad civil (sociedades médicas) formaron una alianza para revisar la evidencia científica y desarrollar un consenso que guíe la práctica clínica en Argentina. Esta colaboración es fundamental para unificar criterios y potenciar el impacto de las recomendaciones de salud.

¿Hay algún indicador de los ODS mencionado o implícito en el artículo que pueda usarse para medir el progreso hacia los objetivos identificados?

• Indicador 3.4.1: Tasa de mortalidad atribuida a las enfermedades cardiovasculares, el cáncer, la diabetes o las enfermedades respiratorias crónicas

  Este indicador está implícito en el objetivo central del artículo. La finalidad de recomendar vacunas para la prevención cardiovascular es, en última instancia, reducir la incidencia de infartos e ictus y, por lo tanto, disminuir la tasa de mortalidad por enfermedades cardiovasculares en la población de riesgo. El progreso se mediría observando una reducción en esta tasa en los grupos que siguen las recomendaciones de vacunación.

• Indicador relacionado con la Meta 3.b: Proporción de la población objetivo cubierta por las vacunas incluidas en los programas nacionales

  Este indicador es mencionado explícitamente. El artículo expresa una preocupación por las bajas tasas de vacunación y su objetivo es “mejorar las tasas de inmunizaciones en adultos”. El Dr. García Zamora menciona una encuesta donde “1 de cada 4 [profesionales] no estaba vacunado contra influenza”, lo que evidencia la necesidad de aumentar la cobertura. El éxito de la iniciativa del consenso se podría medir directamente a través del aumento en la proporción de adultos con enfermedades cardiovasculares que reciben las vacunas recomendadas (influenza, neumococo, etc.).

ODS, metas e indicadores

Fuente: espanol.medscape.com