Un terremoto y tsunami como los de Rusia en Perú sacudirían la economía con más de US$17.700 millones: los sectores que se ‘hundirían’ primero – Infobae

Un terremoto y tsunami como los de Rusia en Perú sacudirían la economía con más de US$17.700 millones: los sectores que se ‘hundirían’ primero – Infobae

 

Informe de Evaluación de Riesgo Sísmico y de Tsunami en Perú y su Implicancia en los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS)

1. Contexto y Alerta Reciente

A raíz del sismo de magnitud 8.7 en la península de Kamchatka, Rusia, se ha activado una alerta de tsunami en la cuenca del Pacífico, incluyendo la costa peruana. Este evento subraya la urgencia de evaluar la preparación del país y las potenciales consecuencias de un desastre de gran magnitud, analizando el impacto directo sobre la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible.

Análisis del Impacto Potencial sobre el Desarrollo Sostenible

2. Impacto Económico y Retroceso en el ODS 8

Un evento sísmico de magnitud 8.5, acompañado de un tsunami, representaría un severo golpe para el crecimiento económico del Perú, afectando directamente el ODS 8 (Trabajo Decente y Crecimiento Económico).

  • Pérdidas estimadas: Un estudio del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) proyecta pérdidas económicas que podrían alcanzar los 17,730 millones de dólares.
  • Costos históricos: En las últimas cinco décadas, los terremotos han representado un costo promedio anual de 500 millones de dólares para el país. El sismo de Pisco (2007) generó pérdidas por 2,700 millones de dólares, equivalentes al 2.8% del PBI de ese año.
  • Distribución del daño sectorial:
    1. Infraestructura: 40%
    2. Vivienda: 30%
    3. Sector productivo: 20%
    4. Servicios (educación, salud): 10%

3. Vulnerabilidad de la Infraestructura y Ciudades (ODS 9 y ODS 11)

La resiliencia de las ciudades e infraestructuras es fundamental para el desarrollo. Un desastre natural de esta escala comprometería gravemente el avance hacia el ODS 9 (Industria, Innovación e Infraestructura) y el ODS 11 (Ciudades y Comunidades Sostenibles).

  • Infraestructura Crítica en Riesgo: Se estima que al menos 500 millones de dólares en daños corresponderían a infraestructura pública esencial como puentes, carreteras y redes de servicios básicos, paralizando la conectividad y el funcionamiento del país.
  • Vulnerabilidad Urbana en Lima: La capital concentra una alta vulnerabilidad debido a:
    • La naturaleza de sus suelos (desde Ventanilla hasta Lurín).
    • Antigüedad de edificaciones en distritos como Rímac y Cercado de Lima.
    • Construcciones informales que no cumplen con la normativa de seguridad, especialmente en distritos como San Juan de Lurigancho.
    • Presencia de taludes inestables en distritos como La Molina, Ate, Comas e Independencia.

4. Impacto Humano y Social: Un Desafío para los ODS 1, 3 y 11

Más allá de las cifras económicas, el costo humano amenaza directamente el progreso en la erradicación de la pobreza, la salud y el bienestar de las comunidades.

  • Población en Riesgo Muy Alto (ODS 11): Según el Centro Nacional de Estimación, Prevención y Reducción del Riesgo de Desastres (Cenepred), solo en Lima, 505,523 personas se encuentran en zonas de muy alto riesgo ante un tsunami. A nivel nacional, 182 distritos presentan un riesgo sísmico muy alto.
  • Impacto en la Pobreza (ODS 1): El informe de CEPLAN (2020) advierte que el aumento de desastres amenaza los medios de vida de las comunidades más pobres, exacerbando la vulnerabilidad económica y social y dificultando la salida de la pobreza.
  • Afectación a la Salud y Bienestar (ODS 3): La destrucción de hospitales y centros de salud, que representa parte del 10% de las pérdidas en servicios, limitaría la capacidad de respuesta médica en el momento más crítico, contraviniendo las metas del ODS 3.

Conclusiones y Proyecciones Estratégicas

La alerta de tsunami generada por el sismo en Kamchatka es un recordatorio de la exposición de Perú a desastres naturales. El impacto potencial no solo se mide en pérdidas económicas, sino en un significativo retroceso en los Objetivos de Desarrollo Sostenible. La planificación estratégica (CEPLAN) y la gestión de riesgos (INDECI, Cenepred) deben priorizar la construcción de resiliencia como eje central para garantizar un desarrollo sostenible, seguro e inclusivo, enfocándose en el fortalecimiento de la infraestructura (ODS 9) y la protección de las comunidades vulnerables en ciudades y asentamientos (ODS 11).

1. ¿Qué Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) se abordan o están conectados con los temas destacados en el artículo?

ODS 1: Fin de la Pobreza

  • El artículo destaca cómo los desastres naturales, como terremotos y tsunamis, amenazan los medios de vida de las comunidades más pobres. La destrucción de viviendas e infraestructura y la pérdida económica pueden empujar a las personas a la pobreza o agravar su situación. El informe de CEPLAN citado refuerza esto al señalar que la exposición a desastres “amenazan especialmente los medios de vida de las comunidades más pobres”.

ODS 9: Industria, Innovación e Infraestructura

  • Este objetivo es central, ya que el artículo cuantifica el impacto devastador en la infraestructura. Se menciona que las pérdidas económicas podrían alcanzar los 17.730 millones de dólares, con un 40% de estas pérdidas afectando directamente a la infraestructura como “puentes, carreteras, redes de servicios básicos, escuelas y hospitales”. La necesidad de construir infraestructura resiliente es un tema implícito en todo el análisis de riesgo.

ODS 11: Ciudades y Comunidades Sostenibles

  • Este es el ODS más relevante del artículo. Se enfoca directamente en la vulnerabilidad de los asentamientos humanos. El texto menciona que Lima podría enfrentar la devastación de “más de 505.000 personas vulnerables” y que 182 distritos del país presentan un riesgo muy alto ante sismos. También aborda la calidad de las edificaciones, señalando riesgos por la “antigüedad de sus edificaciones” y “construcciones que no cumplen con la normativa vigente”, lo cual se opone al concepto de ciudades seguras y resilientes.

ODS 13: Acción por el Clima

  • Aunque el artículo se centra en un desastre geológico, lo conecta con el contexto climático más amplio. Cita un informe de CEPLAN que anticipa “un aumento en la frecuencia de eventos climáticos extremos en Perú y América Latina para 2030 y 2050”. Esto vincula la preparación para desastres sísmicos con la necesidad general de fortalecer la resiliencia ante peligros naturales y climáticos, un pilar del ODS 13.

2. ¿Qué metas específicas de los ODS se pueden identificar en función del contenido del artículo?

Meta 1.5: Fomentar la resiliencia de los pobres y las personas vulnerables ante los desastres

  • El artículo identifica directamente a las poblaciones vulnerables. El análisis de Cenepred estima que solo en Lima hay “una población vulnerable de 505.523 personas” en distritos con nivel de riesgo muy alto ante tsunamis. Además, el informe de CEPLAN subraya que los desastres “amenazan especialmente los medios de vida de las comunidades más pobres”, lo que se alinea perfectamente con el enfoque de esta meta.

Meta 9.1: Desarrollar infraestructuras fiables, sostenibles, resilientes y de calidad

  • La discusión sobre las pérdidas económicas se centra en gran medida en la destrucción de infraestructura. El artículo detalla que “la infraestructura suele absorber el 40% de las pérdidas, con puentes, carreteras, redes de servicios básicos, escuelas y hospitales inutilizados”. La mención de un costo potencial de 17.730 millones de dólares en daños subraya la falta de resiliencia de la infraestructura actual y la necesidad de mejorarla.

Meta 11.5: Reducir significativamente el número de muertes y de personas afectadas por los desastres y reducir las pérdidas económicas

  • Esta meta es el núcleo del artículo. Se cuantifican tanto las posibles pérdidas humanas como las económicas. Se habla de “más de 505.000 personas vulnerables” y se citan pérdidas económicas potenciales de “17.730 millones de dólares”. Además, se proporciona un dato histórico: el terremoto de Pisco en 2007 causó pérdidas equivalentes al “2,8% del PBI de ese año”, lo que se relaciona directamente con la medición de pérdidas económicas en relación con el PIB que propone esta meta.

Meta 11.b: Aumentar considerablemente el número de ciudades que adoptan y ponen en práctica políticas y planes integrados para la resiliencia ante los desastres

  • El artículo menciona a varias instituciones peruanas que trabajan en la gestión del riesgo de desastres, como el “Instituto Nacional de Defensa Civil – INDECI”, la “Marina de Guerra”, el “Centro Nacional de Estimación, Prevención y Reducción del Riesgo de Desastres (Cenepred)” y el “Instituto Geofísico del Perú (IGP)”. La existencia y las acciones de estos organismos, como la emisión de alertas y la elaboración de escenarios de riesgo, son una manifestación de la implementación de planes de resiliencia, aunque el artículo también expone las brechas existentes.

3. ¿Hay algún indicador de los ODS mencionado o implícito en el artículo que pueda usarse para medir el progreso hacia los objetivos identificados?

Indicador 11.5.1: Número de muertes, personas desaparecidas y personas directamente afectadas atribuidas a desastres por cada 100.000 habitantes

  • El artículo proporciona datos clave para este indicador. Menciona explícitamente el número de personas en riesgo: “Lima podría enfrentar la devastación para más de 505.000 personas vulnerables ante un tsunami”. También se citan cifras adicionales de personas expuestas en distritos de riesgo alto (“414.074 personas expuestas”). Estas cifras son estimaciones de “personas directamente afectadas” en un escenario de desastre.

Indicador 11.5.2: Pérdidas económicas directas atribuidas a los desastres en relación con el producto interno bruto (PIB)

  • El texto ofrece varias cifras que sirven para este indicador. Primero, la estimación de pérdidas potenciales de un gran terremoto y tsunami: “17.730 millones de dólares”. Segundo, un dato histórico concreto: el terremoto de Pisco de 2007 provocó “pérdidas por 2.700 millones de dólares, equivalentes al 2,8% del PBI de ese año”. Tercero, el costo promedio anual de los terremotos en las últimas cinco décadas: “500 millones de dólares anuales”.

Indicador 11.b.1: Proporción de gobiernos locales que adoptan y aplican estrategias locales de reducción del riesgo de desastres

  • Aunque no se menciona el indicador de forma explícita, la existencia y el trabajo de organismos como INDECI y Cenepred, que elaboran “escenarios de riesgo” y coordinan con autoridades locales, implican la existencia de estrategias nacionales y locales de reducción de riesgos. El artículo identifica 182 distritos con riesgo muy alto ante sismos y 14 ante tsunamis, lo que define el universo de gobiernos locales que necesitan urgentemente estas estrategias. La mención de que en San Juan de Lurigancho proliferan “construcciones que no cumplen con la normativa vigente” evidencia una brecha en la aplicación de dichas estrategias a nivel local.

ODS, metas e indicadores

Objetivo de Desarrollo Sostenible (ODS) Meta del ODS Indicador del ODS
ODS 1: Fin de la Pobreza 1.5: Para 2030, fomentar la resiliencia de los pobres y las personas en situaciones vulnerables y reducir su exposición y vulnerabilidad a los fenómenos extremos relacionados con el clima y otras crisis y desastres económicos, sociales y ambientales. 1.5.1: Número de personas directamente afectadas atribuidas a desastres (mencionado en el artículo como “más de 505.000 personas vulnerables”).
ODS 9: Industria, Innovación e Infraestructura 9.1: Desarrollar infraestructuras fiables, sostenibles, resilientes y de calidad para apoyar el desarrollo económico y el bienestar humano. El artículo implica la necesidad de medir la resiliencia de la infraestructura al señalar que el 40% de las pérdidas por terremotos afecta a “puentes, carreteras, redes de servicios básicos, escuelas y hospitales”.
ODS 11: Ciudades y Comunidades Sostenibles 11.5: Para 2030, reducir significativamente el número de muertes y de personas afectadas por los desastres, y disminuir considerablemente las pérdidas económicas directas con respecto al producto interno bruto mundial. 11.5.1: Número de personas directamente afectadas (estimado en “505.523 personas” vulnerables en Lima).
11.5.2: Pérdidas económicas directas en relación con el PIB (mencionado como “17.730 millones de dólares” potenciales y el “2,8% del PBI” en el sismo de 2007).
ODS 11: Ciudades y Comunidades Sostenibles 11.b: Para 2020, aumentar considerablemente el número de ciudades y asentamientos humanos que adoptan y ponen en práctica políticas y planes integrados para promover la resiliencia a los desastres. 11.b.1: La existencia de estrategias de reducción de riesgos, implícita en las acciones de INDECI, Cenepred e IGP, que realizan análisis de riesgo para distritos específicos.
ODS 13: Acción por el Clima 13.1: Fortalecer la resiliencia y la capacidad de adaptación a los riesgos relacionados con el clima y los desastres naturales en todos los países. 13.1.1: La existencia de estrategias nacionales de reducción del riesgo de desastres, evidenciada por los informes y alertas de CEPLAN, INDECI y Cenepred mencionados en el texto.

Fuente: infobae.com